Capitulo 72

Los días seguían pasando, y todo iba viento en popa. Tu relación con Pedro se reforzaba día a día, se amaban con locura. 

Así como su relación crecía, la de tu papa y Jazmín también lo hacía a la par, te encantaba la idea de verlo feliz y sonriente al igual que vos, eso significaba que a ninguno le faltaba amor, a ninguno le hacía falta lo que por tantos años añoraron.

Pedro y tu papa estaban haciéndose amigos de a poquito, tu amor implemento el consejo que le habías dado acerca de hablar con tu padre sobre tenis…así había comenzado su “relación” de yerno y suegro. Aunque él seguía con sus típicos palos para Pedro, sabias que solo lo hacía frente a vos y para fastidiarte, tu novio lo manejaba mucho mejor. Y hablando de relaciones, la tuya con Jazmín también iba bien, por cosas de la vida, no pudo tener hijos lo que te daba pena, porque habría sido una mama excelente, una que te hubiera gustado tanto tener.  Se había abierto con vos de una forma que te sorprendió, pero fue lo que te dio pie a que vos lo hicieras con ella también…Ella, vos y Clarita, eran un gran equipo…un gran equipo y en contra de tu padre.

Hoy, después del colegio,  irías al consultorio de tu amor, primeramente para pasar el día con el…y luego para hacerle saber que esta noche saldrías con tus amigas, las cuales estaban enojadas porque últimamente casi nunca tenías tiempo para ellas…y en un punto era verdad, y tendrías que empezar a cambiar eso si no querías que te asesinaran. 

Ahora mismo estaban en la hora de Derecho, y todos hablando a cuatro manos, la profesora de esa materia era un amor, y mientras no la molestasen podían hacer lo que querían.

-¿Qué se van a poner?—pregunto Pilar, mientras dibujaba mandalas sobre una hoja—

-No tengo idea—dijo Ema—no tengo nada…vos Paula, me fijo en tu ropero que puedo ponerme—dijo ella y reíste—

-Ah, tranquila…okey, pero primero veo yo que me pongo, despues saca lo que quieras—dijiste y ella te sonrio—

-yo tampoco tengo idea—respondio Greta, mientras se pintaba las uñas--

-ponete el vestidito negro—dijo Pilar guiñándote un ojo, y haciéndote reir. Pedro iba a dejarte encerrada si lo hacias—

-¿ustedes quieren que me deje o que?—preguntaste riendo—

-No estaría mal…volverían las tardes de amigas—dijo Ema y vos rodaste los ojos para luego suspirar—

-cortenla con eso…ya dije que acepto que las tengo descuidadas, pero no hace falta que me lo estén repitiendo a cada rato—dijiste—

-si chicas…yo no lo siento asi, tenemos que apoyarla, esta enamorada—dijo Greta y Pilar respiro profundamente—

-Estas buscando que te tire la mochila por la cara—dijo ella haciéndolas reir—

-no seas agresiva ¡hey!—dijiste—y pienso lo mismo, saben que nunca me paso algo asi…y nada—te encogiste de hombros—

-lo sabemos…pero te consume—dijo Ema riendo—que te comparta un toque hermano, todo bien que a los dos le guste la matraca pero hay una vida afuera de su cama y de su cuarto—dijo y reíste para luego pegarle en el brazo—

-y te aviso desde ya…que te vas a dar el pedo de tu vida—dijo Pilar señalándote y la miraste—

-Ni loca…ni soñando—dijiste negando con la cabeza—

-¡Paula! ¡dijimos que íbamos a volver a esas noches!—dijo Ema—

-chicas…enserio—dijiste mirándolas con suplica—

-vos no llegas a tomar y te juro que te reventamos el culo a patadas—dijo Pilar—

-no dije que no iba a tomar…pero ponerme en pedo, olvídense—dijiste—

-ya lo veremos—dijeron Ema y Pilar, subiendo y bajando sus cejas con gracia, vos rodaste tus ojos y Greta rio, eran terribles—

Una vez que saliste del colegio, te tomaste un taxi hasta la clínica. Estabas que morías por verlo, y aun no pasaban veinticuatro horas de que lo habías visto, es más…habían dormido juntos, obviamente que con ayuda de Jazmín, tu mejor aliada a la hora de cubrirte con tu papa. Mientras caminabas hacia la recepción, chocaste con alguien…

-¡uy! ¡perdon! ¡perdon!, no estaba mirando mi camino—dijiste disculpándote y cuando viste de quien se trataba sonreíste—¡Anita!—la saludaste—

-¡hola corazon! ¡tanto tiempo!—dijo ella abrazándote con alegría—¿Cómo estas?—pregunto ella, mientras acariciaba tus brazos con cariño—

-todo bien…vine a visitar a su bebe—dijiste y ella sonrio—

-si, me dijo…te juro que si no te quisiera tanto como lo hago, le cerraría la boca de una patada porque cuando se trata de vos no se calla un segundo—dijo ella y reíste—

-¿Cuándo vamos a comer otra vez?, mire que me tiene que seguir pasando recetas eh—dijiste,  haciéndola reír, la semana pasada te había invitado a almorzar cuando pasaste a saludar a Pedro, obviamente que tu amor quedo afuera, y se enojó con su madre—

-mmm hoy no te pido porque se me va a enojar el retoño, ¿el lunes te parece?—pregunto y asentiste—

-perfecto…la dejo Anita, me voy a ver a su retoño—dijiste y ella beso tu mejilla reiteradas veces—

-dale mi vida, cuídate—dijo ella y siguió con su camino, y obviamente que vos seguiste el tuyo hasta su consultorio-

Una vez que llegaste, abriste la puerta con suavidad, como lo hacías la mayoría de las veces. Él estaba completando unas fichas, y asi tan concentrado como ahora, te encantaba.

-Que lindo ese doctor—dijiste y el levanto la vista con una enorme sonrisa—

-Hola mi amor—dijo el, poniéndose de pie, y caminando hasta vos para abrazarte y besarte—

-hola gordo—dijiste besándolo nuevamente, y otra vez, como pasaba siempre que ibas a verlo, se emociono con el beso , y te sentó sobre su escritorio—¡hey! ¡hey!...tranquilo—dijiste separándote, y el te sonrio—

-sos muy linda che—dijo el, acariciando tus piernas—¡odio tu pollera con todo mi ser!—dijo el y reíste para luego besar tu mejilla—termino con esto y nos vamos—dijo el y asentiste—

-recién me invitaron a almorzar el lunes—dijiste, mientras ordenabas los papeles desparramados a tu lado—

-¿si? ¿Quién?—pregunto el, mientras escribia—

-mi suegra—dijiste y el levanto la vista—

-¿otra vez? Te juro que le voy a conseguir un novio, me quita a la mia—dijo el haciéndote reir—igual…mi suegro me invito a jugar mañana—dijo el y volviste a reir, tu papa lo volvia loco con el tenis, y menos mal que a Pepe le gustaba, de lo contrario, no sabias que iria a hacer—

-que bueno…otra tarde de shopping con Jaz entonces—dijiste y el te saco la lengua—

-te amo—dijo tirándote un beso—

-yo a vos…apurate que tengo hambre—dijiste y el te sonrió—

Como amabas esa sonrisa…eras capaz de morir por ella.

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Buenas!!!!! acá estoy, presente, cumpliendo con ustedes! les dejo el capitulo Setenta y dos, que espero les guste y  mas todavia, que COMENTEN. es lo único que les pido.

Si hay MUCHOS, MUCHOS, MUCHOS comentarios, mañana tienen otro...pero solo si hay MUCHOS, y (con muchos  me refiero a mas de 10). Y CON NOMBRE DE TWITTER.

linda noche!!!! @PauliterBel.

Cualquier cosilla>>   (PREGUNTEN QUE ME ABURRO)   >>>>  http://ask.fm/BeluPauliterr.